"El pelo se le ha caído hacia uno de los lados de la cara. Los labios se abren y dejan ver, pálidas, las encías. La nuca queda al descubierto y distinguís el lunar que has besado tantas veces, latiendo suavemente. Pero ella ya no es ella: es un error que se ha desprendido de tu cuerpo".
Tomás Eloy Martínez. El vuelo de la reina, 2002. Página 291. Editorial Alfaguara.
Se hace lo que se puede, Pablo. Ni siquiera soy aficionada, sólo saco fotos y me lleno de consejos de quienes estudian fotografía (que cada vez son más). De todas maneras, agradezco tu halago.
ResponderEliminarTengo dos más para leer de Tomás Eloy: Santa Evita y Lugar común la muerte. Ya llegaré al Purgatorio. Tiene un estilo bien fuerte, marcado, confrontativo... y me gusta.
Besos y gracias por la visita!
¡Wow!
ResponderEliminarNo soy muy original, pero me sale eso ¡wow! Por la foto y por el texto y por la no separación de ambos, porque juntos quedaron bárbaros.
¡Te agradezco Flowers!
ResponderEliminarUn beso grande y que tengas un lindo domingo :)